Dirección:
Isla Eliot 3736
Col. Villa Vicente Guerrero
Guadalajara, Jalisco
CP 44987
Introducción
Y creo en una santa iglesia universal y apostólica.
Confieso un Bautismo para remisión de pecados,
Y espero la resurrección de los muertos.
Y la vida del Siglo venidero. Amén.
- Creo en la iglesia
Creer en la iglesia es creer en la obra de Dios. Creemos que el Padre tiene un pueblo, Cristo
murió por ese pueblo y el Espíritu Santo lo une. Creemos que la iglesia es una obra de Dios
sobrenatural.
¿Por qué no dice el credo: “creemos en la familia”? Porque la familia es una institución natural, pero la iglesia es una institución sobrenatural.
El credo especifica aspectos de la naturaleza de la iglesia.
- Creemos en una iglesia
- Creemos en una iglesia que es santa
- Creemos en una iglesia que es apostólica
Primer problema: ¿Universal? ¿Católica? Por la católica el credo se opone a los sectarios que
piensan que la única iglesia es esta o aquella.
Segundo problema: ¿confieso un bautismo para remisión de pecados?
¿Qué significa: Confieso un bautismo para remisión de pecados? En un sentido, la respuesta es bastante sencilla, aunque nuestro bagaje papista lo complica.
— Hechos 2:38, 1 Pedro 3: 21-22.
En la Biblia vemos clara evidencia que el orden de la salvación es este:
- Se escucha el evangelio (Romanos 10)
- El Espíritu obra (Hechos 16:14)
- El hombre cree y se arrepiente (Hechos
10, Hechos 8: 34). - Es bautizado (Hechos 2:41)
En palabras sencillas, esto se puede explicar así: el arrepentimiento y la fe en Jesucristo, son
resumidos en una sola frase: bautismo. Bajo el concepto del bautismo se encierra todo ese significado. En otras palabras, el credo está diciendo: confieso el arrepentimiento y la fe que
se simboliza en el bautismo para la remisión de pecados.
El bautismo es un símbolo rico de nuestra salvación:
- Representa el arrepentimiento y la fe.
- Hércules Collins en el catecismo ortodoxo dice lo siguiente sobre el significado de este lenguaje: “Dios no habla de esta manera sin una gran razón, a saber: no solo para enseñarnos que, así como la suciedad de nuestro cuerpo, es limpiada por el agua, también nuestros pecados son limpiados por la sangre y el Espíritu de Cristo, sino aún más para asegurarnos por esta divina señal y promesa que somos lavados de nuestros pecados con el lavamiento interno, tan cierto como que somos lavados por el agua externa y visible.”
- Espero (creo) la resurrección de los muertos y la vida eterna
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